Tras la retirada de Tiago en 2018, que había tenido en Mario Suárez y Augusto Fernández a sus perfectos escuderos, Simeone consiguió cubrir el enorme vacío del portugués juntando un doble pivote con juventud, físico, trabajo, calidad y llegada: Rodrigo Hernández y Thomas Partey. Christian Pulisic marcó gol en la final de la FA Cup vistiendo la nueva casaca; sin embargo, cayeron a manos del Arsenal y el artillero de la selección de Estados Unidos cojeó para abandonar el terreno.