El 30 de septiembre de 1975, Perú y Brasil se enfrentaron por las semifinales. En el primer partido, en Belo Horizonte, Perú derrotó por un marcador de 3-1 a Brasil. Parece ser que no había acuerdo sobre la forma y el contenido del escudo y en un momento de la reunión el secretario, Luis d’Ossó, visiblemente enfadado, exclamó «esto es una olla», por lo que algunos historiadores creen que este fue el punto de partida para «trazar el boceto de una olla».