El tercer puesto logrado por la selección de Croacia, comandada por el entonces delantero del Real Madrid Davor Šuker, así como las historias que le contaban sus padres sobre la Guerra de los Balcanes y la separación de Yugoslavia, lo llevaron a buscar el histórico jersey a cuadros del equipo. Lubo era, verdaderamente, un chico trabajador, lo demostró haciendo historia en el Valencia y en el Atlético de Madrid. La idea detrás de esta camiseta, según Nike, era representar el concreto agrietado que sirve de campo para el fútbol callejero de Sao Paulo.